Epopeya de una tentación imposible

Día 25, 26 y 27: el destino está a mi favor (menos mal).

Mi mente comienza a jugarme trucos. Estoy en una lucha contínua entre rendirme (dícese del acto de halarme el mono, volar el papagayo, darle de comer al mostro, mojar la brocha, el golpe de los traidores, dele papi dele, etc), sucumbir ante la tentación y entregarle mi pureza inocente a la blondie preciosita o aguantar.

Estoy atentando contra las leyes naturales de la naturaleza (#ManuelRosalesQuotes), que nos dicen lo siguiente: esparce tu semilla. Digamos que ya necesito un silo para guardar los litros, que digo, los kilos de semillas retenidos. El Batallón se quiere sublevar, necesito concentrarme para evitar que ataquen a cualquiera. Las carajas me hablan y
 yo las miro a los ojos disimulando que les paro bolas, cuando en verdad lo que estoy pensando es: toma toma toma perra perra perra dale dale dale teta culo totona teta teta tetaaaaaaaaa. Todo balbuceado.

Me siento un camionero/obrero de pura cepa. De esos que puede estar pasando una jeva con los pies peludos y manzana de adán y se la sadiquean "mameeeh quisiera ser autobusero pa montarte en todas las paradas" chupándose los dientes. Bueno, así. Lo peor es que tengo para mi deleite una de las mujeres más bellas y atractivas que haya visto en la viña del señor, y tengo que negármela.

Ni el jueves ni el viernes la ví :(. Que disyuntiva tan arrecha; si la veo corro el riesgo de perder pero soy feliz, si no la veo estoy quesudo tranquilo pero la extraño. Qué hacer?. La niña además me tira un psicoterror gráfico cuando no estamos juntos. Digamos que es muy fotogénica <3.

Me encuentro en Valencia, lejos de la tentación. Creo que lo necesitaba, me sentía débil y con ganas de claudicar frente a esos cabellos rubios, esa cara de muñeca y ese cuerpo escultural. El paquete completo en 1,52m de altura y 47 kilos.

Estos días de ventaja tienen su doble filo. Estoy seguro que la rubia sol intensificará sus ataques. Comienza la semifinal de la tortura, tan sólo quedan 2 semanas. Quién podrá más? Mi queso o mi fuerza? el final está cerca. La carrera por ganar mi corazón ya terminó y ganó por 100 cuerpos de ventaja. También ganará la carrera por mis bolas?

Uds qué dicen?