Epopeya de una tentación imposible

Día 4:
Kill me now. Voy a necesitar al Dalai Lama para que me dé aguante. Menos mal que en la piscina habia puras gordas horribles y asi por lo menos rechacé mentalmente la imagen femenina. Pero gracias a esta niña (q aun uds no saben quien es) la imagen de las gordas desapareció y sólo queda la desesperación de dar vuelta y vuelta en mi cama con pensamientos bastantes impuros. Juega conmigo y yo no tengo casi herramientas para defenderme, solo el saber que el premio podría llegar a ser muy interesante. Es una contradicción, porque el premio podría ser precisamente lo que me hiciese perder cualquier día. Ella lo sabe y lo utiliza. 

Estamos mal. Paso todo el día pensando al respecto, y cuando no, me tiene distraído con cosas lindas. Si alguien sabe el remedio para sacarse a una persona de la cabeza, porfa, hágame la segunda. Necesito apoyo jajaja aun faltan 36 días. Al ritmo que vamos me veo teniendo que amarrarme las manos. Y encerrarme en mi casa. Bueh, como vaya viniendo vamos viendo. La estrategia tiene que ser sobrevivir un día a la vez. En eso estoy. Hoy, sobreviví. Pero el no saber si maÑana lo haga, me tiene un pelin preocupado. Ya veremos! Mañana les cuento que otra maldad me hicieron. Hoy solo puedo decirles que amo un abdomen. Bye